Bernardo Quesada
Cuando no nos queda más remedio
Que vivir la vida como se nos da
Para de nada construir
La felicidad, o al menos algo similar
Que nos permita madurar un mal momento…
Cuando no nos sirve para nada ser capaz
De defenderse a mano limpia
Contra un monstruo sideral
Cuando estos brazos que te esperan
No comprenden que les queda
Solo llenarse de fé para aguantar.
Sólo un ángel
Puede regalarte ese consuelo
Sólo un ángel puede devolverte la razón
Sólo un ángel
Puede rescatarte del infierno
Rejuntar millones de pedazos
Sólo un ángel puede repararte el corazón.
Cuando aquellas manos que acarician
O de un golpe cicatrizan
Según sea tu voluntad
Son las mismas manos que empuñamos
Las que hoy aquí juntamos
Cuando es tiempo de rezar…
Cuando nunca fuimos enseñados
Que no hay muerte
Que la vida continua
Y que nos vamos a encontrar…
Sólo el más hombre de los hombres
Es capaz de darnos fuerzas
Si se muere de las ganas de llorar
Y cuentan que en el patio de la abuela
De mis sobrinos
Uno menos juega a construir
Un tanque con tuquitos de madera
O talvez una nave espacial
Porque a mis hijos
Como a mis sobrinos
Los cuida cada día
Un ángel de la guarda personal
www.bernardoquesada.com
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